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No muy lejos de la ciudad de Yeghegnadzor, a unos 120 km de la capital Yerevan, en una zona montañosa se encuentra el Monasterio de Noravank. Este complejo es una de las atracciones arquitectónicas que la mayoría de los viajeros quieren ver durante su visita a Armenia. El camino a Noravank puede parecer largo pero nunca aburrido, ya que en el camino se pueden admirar los paisajes armenios y detenerse en diferentes pueblos para comprar frutas y verduras locales. Como casi todos los antiguos monasterios de Armenia, el Noravank está situado en una colina desde donde casi se puede tocar el cielo.
Noravank es un monasterio del siglo XIII. Entre los siglos XIII y XIV fue uno de los principales centros religiosos y culturales de Armenia. El complejo tiene dos iglesias: St. Astvatsin y St. Karapet.
Noravank monastery
Noravank Monastery Rd, 3604, ArmeniaIglesia de San Astvatsin
La iglesia de San Astvatsin fue construida en 1339 por el conocido arquitecto Momik. Fue arquitecto de muchas iglesias diferentes, pero dicen que el Noravank fue su última y mejor obra. La iglesia tiene dos plantas. Se puede llegar al segundo piso desde el exterior por las estrechas escaleras. La construcción fue financiada por la familia del Burtel Orbelian, por lo que en la primera planta se colocan las tumbas de sus familiares. En el segundo piso, se encuentra una rotonda multicolumna. En general, el edificio es único en su estilo e impresionante, tanto desde el interior como desde el exterior. Las paredes están decoradas con diferentes ornamentos.
foto © créditos para Aramyan
Iglesia de San Karapet
La iglesia de St. Karapet, construida por Lipartit Orbelian, se encuentra cerca de la iglesia de St. Fue construida en 1227, y debe su nombre a la iglesia que estaba situada en el mismo lugar y que quedó en ruinas durante el terremoto. La iglesia ha sido reconstruida varias veces, pero nunca perdió su aspecto inicial. La fachada de la iglesia está decorada con una representación de "Dios Padre", rodeada de bonitos ornamentos. Lo que es interesante, esta imagen de Dios, en la entrada principal, recuerda la apariencia de los mongoles de esa época. Dicen que Momik lo diseñó de esa manera para que los mongoles asocien esa imagen con ellos mismos y no destruyan la iglesia. Teniendo en cuenta que la iglesia permanece en pie hasta nuestros días, podemos asumir que la idea de Momik funcionó.
foto © créditos a Tomasz Dutkiewicz
Además de las iglesias que se pueden ver allí y la impresión que se obtiene al explorarlas desde el interior, también se puede admirar un paisaje alucinante que se abre desde el Monasterio de Noravank. Las colinas con acantilados de ladrillo rojo que rodean la zona, así como una colina en la que se sitúa el monasterio y desde la que se siente que se puede tocar el cielo, están rodeadas por un desfiladero por el que discurre el río Amaghu. Este lugar es agradable a cualquier hora del día pero las tardes, y especialmente los atardeceres, lo hacen aún más admirable al envolver el área en hermosos colores. También es un lugar perfecto para tomar fotos.
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El autor
Lusine Vardanyan
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