Castello di Magrano

Este magnífico castillo se remonta a la Alta Edad Media (1200 d.C.), durante la cual fue foco de defensa de la ciudad de Gubbio contra Perugia. Inaugurado en 2009 después de cuatro años de meticulosa renovación, Castello Ducale se encuentra en medio de un pueblo virgen, rodeado de bosques, praderas y cerca de las aguas del río Chiascio. El castillo forma parte de una finca de 500 hectáreas, donde los bosques y campos ofrecen una gran variedad de senderos para montar a caballo e itinerarios para paseos increíbles. Un hermoso jardín de 5.000 metros cuadrados rodea el castillo, con su jardín de rosas, árboles centenarios y una gran piscina. Los propietarios de la finca son descendientes de la familia de Napoleón Bonaparte y han amueblado elegantemente los salones y dormitorios en estilo imperio con los muebles antiguos de la familia. En la torre de vigilancia, incluyendo la tercera planta, se han construido dormitorios, dos de ellos tan grandes que cubren todo el perímetro de la torre. La cocina - una cocina de acero inoxidable altamente funcional y profesional - está pensada para el uso de los clientes y el personal y es más que adecuada para el catering de recepciones de boda o fiestas. Tiene acceso directo al patio interior del castillo así como a las demás zonas exteriores. Los cuartos de huéspedes son independientes, pero también están conectados con el castillo por un antiguo pasadizo secreto. Los usuarios de sillas de ruedas son bienvenidos. Junto con el alojamiento de los huéspedes, el Castello Ducale puede alojar hasta 30 personas y el precio incluye tanto el servicio de limpieza diario (excepto los domingos) como la preparación diaria de los desayunos (excepto los domingos, sin incluir el coste de la comida). Si lo desea, puede contratar a un chef para que le sirva la cena, que puede disfrutar en el magnífico entorno del patio dentro de las maravillosas murallas del castillo o bien fuera del castillo en la zona de terrazas frente al parque, cerca de la cocina. La ubicación del castillo permite excursiones relajadas por la mañana y por la tarde a Gubbio, Perugia, Asís y Cortona. Además, se pueden organizar excursiones de un día a Siena, Florencia, Montepulciano y Orvieto. Alojarse en el Castello Ducale significa pasar unas vacaciones maravillosas en un lugar de ensueño, en el que uno se encuentra recordando la sensación de ser "dama o caballero de la corte" en un entorno natural e histórico y en el que no se puede dejar de olvidar las pruebas y tribulaciones cotidianas del siglo XXI.