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Si vives en Austria, un país con más de 2.500 kilómetros de remontes mecánicos y 7.000 kilómetros de pistas de esquí preparadas, es probable que sepas esquiar. Incluso su capital, Viena, situada en un terreno bastante llano, ofrece la posibilidad de esquiar dentro de los límites de la ciudad. Alrededor de Viena, en el estado federal de Baja Austria, hay numerosas zonas de esquí que son adecuadas para una excursión de un día desde la ciudad. En este artículo hecho para todos los visitantes de la capital austriaca, les presentaré dos áreas de esquí más pequeñas pero hermosas y bien equipadas cerca de Viena, donde pueden pasar un día reservado sólo para esquiar.
Unterberg
Unterberg es un pequeño centro de esquí situado a 70 km (menos de una hora en coche) de Viena. Cuenta con 12 pistas de esquí bien cuidadas de unos 16 kilómetros de longitud. Las pistas son azules, fáciles y rojas para los esquiadores intermedios. El área de esquí se encuentra en un pico de 1342 metros de altura. Desde el punto más alto donde se encuentra la estación superior de remontes, seis rutas diferentes te llevan al valle. Cinco kilómetros de largo llevan directamente al aparcamiento, lo cual es muy conveniente. Una doble campeona olímpica, Michaela Dorfmeister, hizo sus primeros intentos de esquí aquí, y una de las pistas estándar de la FIS lleva su nombre. Esta área de esquí está equipada con cuatro remontes y una alfombra mágica para los que hacen sus primeros intentos con los esquíes. Para aquellos que ya tienen habilidades y les encanta el estilo libre, hay un parque de diversiones.
Annaberg
Annaberg es una zona de esquí familiar perfecta situada a unos 100 km de la capital. Es una de las regiones de esquí más antiguas y mejor organizadas del Estado federado de Baja Austria. Esta estación ofrece 13 kilómetros de pistas, con los tres niveles de dificultad: azul, rojo y negro. La pista negra de descenso FIS es el punto culminante para los esquiadores expertos. Annaberg es muy interesante para los free-stylers porque ofrece dos zonas de freestyle. La "Anna Park Family" es un parque de diversiones, perfecto para los primeros intentos de freestyle. Se ha adaptado a pequeños freestylers y a todo aquel que quiera atreverse a sus primeros toboganes y saltos. Con una longitud de 800 metros, la "Anna-Park Fun Cross" ofrece una acción con giros empinados, olas de nieve y saltos -o, como dicen los expertos, con "giros en curva", "olas" y "pateadores". Se divide en dos pistas de nivel de dificultad - una "Easyline" y una "Sportline". Este último también se utiliza para carreras de cross y de snowboard.
En el punto más alto de la zona de esquí, un restaurante tradicional de montaña Anna-Alm, con una terraza soleada, ofrece refrescos y comida de montaña para los esquiadores.
Si te gusta esquiar y quieres pasar un tiempo activo cuando estés en Viena, deberías planear una excursión de un día reservada sólo para esquiar a las zonas cercanas a la ciudad. Las posibilidades son numerosas.
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El autor
Ogi Savic
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