El glorioso Peterhof: el Versalles ruso cerca de San Petersburgo

Hay muchas oportunidades de embarcarse en un viaje de un día cuando se está en San Petersburgo. Lo primero que se me ocurre es el Versalles ruso - Peterhof, un municipio situado al suroeste de San Petersburgo, en la costa sur del Golfo de Finlandia. Fundada como una gloriosa residencia de verano del emperador Pedro el Grande en el siglo XVIII, hoy en día es un lugar perfecto para pasear y disfrutar tanto de la arquitectura como de la naturaleza.

Peterhof, Saint Petersburg

VW54+JC Petrodvortsovy District, Saint Petersburg, Russia

Un poco de historia

Hasta el siglo XVIII, la tierra donde ahora está Peterhof fue ocupada por dos pueblos finlandeses. Sus nombres eran Pohjajoki y Kuusoja. En 1705, la palabra "Peterhof", traducida del alemán como "el patio de Pedro", se mencionó por primera vez en el diario de viaje del emperador. En aquel entonces, era sólo uno de los muchos lugares para acoger a Pedro el Grande durante sus viajes a la isla de Kotlin, donde se había construido la ciudad fortificada de Kronstadt.

Como persona que obtuvo acceso al Golfo de Finlandia, y por lo tanto, al Mar Báltico, Pedro el Grande quiso fundar la residencia para conmemorar la ocasión. También estaba destinada a ser una de las residencias más destacadas y prominentes de Europa. Así pues, las obras de arquitectura y paisajismo comenzaron en el decenio de 1710 y, tras años de arduos trabajos, se inauguró en agosto de 1723.

Lo que no hay que perderse en Peterhof

El conjunto Peterhof está muy bien pensado, y sus principales objetos de interés son los siguientes: El Gran Palacio de Peterhof, los Jardines Superiores (en ruso - 'Verkhny Sad'), los Jardines Inferiores ('Nizhny Sad'), la Gran Cascada ('Bolshoi Kaskad') de fuentes, y un Canal del Mar de estilo barroco ('Morskoy Kanal'), también conocido como 'Canal de Sansón'. Pero como Peterhof tiene muchas cosas hermosas que vale la pena ver, debes priorizar algunas cosas cruciales que debes ver. Seguramente no podrá ver todo de una vez, y tal vez en algún momento, tendrá que volver a visitar Peterhof.

Así que lo primero que hay que ver es la Gran Cascada, que se considera la tarjeta de visita de Peterhof. Está situada justo en el centro de toda la composición, ya que arriba está el Gran Palacio, y abajo está el Canal del Mar que lleva al Golfo de Finlandia. La icónica escultura de Sansón, una figura bíblica, ganando al león - es un símbolo de la victoria de Rusia sobre Suecia.

Si está visitando con un grupo, no pierda la oportunidad de echar un vistazo al Gran Palacio para ver su maravilloso interior. Tiene un fondo bastante complicado, siendo reconstruido varias veces por diferentes arquitectos y casi destruido durante la Segunda Guerra Mundial. Fue restaurado a mediados del siglo XX. También, los Jardines Superiores, con sus fuentes y formas perfectas, son absolutamente dignos de ver.

Otros lugares de interés incluyen el Parque de Alejandría, menos concurrido por los turistas, y la iglesia gótica de San Alejandro Nevsky, así como la Catedral de San Pedro y San Pablo y las islas artificiales en Olgin Pond.

Cómo llegar allí

Se puede llegar a Peterhof por el tren suburbano. El tren sale de la estación de tren de Baltiysky en San Petersburgo, y tarda aproximadamente 30 minutos en llegar a su destino final. Otra forma de llegar es con un minibús que sale de la estación de tren de Baltiysky y de la estación de metro "Baltiyskaya", así como de las estaciones de metro "Avtovo" y "Leninsky Prospekt".

La forma más inusual y emocionante de llegar a Peterhof es con el barco "Meteor" que sale del muelle cerca del Museo del Ermitage en el centro de San Petersburgo. Es popular entre los huéspedes de la ciudad porque viajar así te da la oportunidad de admirar la naturaleza marina de la capital del norte de Rusia. Pero prepárese para pagar mucho, ya que es más caro que otros medios de transporte.

Cuando esté en San Petersburgo, asegúrese de reservar un día para visitar Peterhof, la gloriosa residencia de verano del emperador Pedro el Grande. Sus fuentes y el magnífico Gran Palacio son adorados por mucha gente. En verano, especialmente cuando hace sol, tienes una oportunidad perfecta para tomar buenas fotos allí y disfrutar de la belleza del "Versalles ruso" cerca de San Petersburgo.