Vinos de altura bolivianos en Tarija

¿Has oído hablar de los vinos bolivianos? Hoy puedes aprender más y descubrir por qué se consideran especiales.

La producción de vino en Bolivia

Bolivia tiene cinco áreas de producción vinícola, ubicadas en cinco de sus nueve departamentos: el Valle Central de Tarija; el Valle de Cintis, en Chuquisaca; el Valle de Samaipata, en Santa Cruz; Luribay, en La Paz; y Vinto, en Cochabamba.

Entre estas áreas, el Valle Central de Tarija es el mayor productor de vino de Bolivia, teniendo casi el 80% de los viñedos del país, y el 93% de la producción de uva destinada al vino.

Aunque Bolivia no está entre los mayores productores vinícolas del mundo, su vino tiene ciertas peculiaridades que hacen que valga la pena probarlo. Por ejemplo, la cosecha en Bolivia es un proceso 100% manual, lo que da puntos extra a la selectividad y calidad final del vino. Pero más allá de eso, déjenme contarles la principal característica distintiva de los vinos bolivianos.

Vino de altura

Según la OIV (Organización Internacional de la Viña y el Vino), un vino se considera de altura cuando las uvas, de las cuales procede, se cultivan a 1000 o más msnm.

En Bolivia, todos los viñedos destinados a la producción de vino se encuentran a 1600 msnm o más alto. ¿Sabes lo que esto significa?

Por qué la altitud importa

Para entender la importancia de la altitud del viñedo, hablemos de los polifenoles, que son antioxidantes presentes en el vino. Varios tipos de polifenoles son determinantes en cuanto al color, sabor, cuerpo, efectos sobre la salud y otras características importantes del producto final. Mencionemos algunos de los polifenoles más decisivos del vino y su importancia: las antocianinas dan al vino su hermoso color característico; los taninos contribuyen a dar cuerpo y astringencia a esta bebida; mientras el resveratrol es responsable de algunos de sus efectos positivos sobre la salud.

Con eso en mente, aquí es donde la altitud entra en juego. A medida que la altura aumenta, la intensidad solar también lo hace, forzando a la uva a desarrollar una piel más gruesa. Allí está la clave: los polifenoles, que he mencionado antes, están presentes en la piel de la uva, por lo tanto, una más gruesa, confiere características interesantes al vino.

Por otro lado, la diferencia de temperatura entre el día y la noche es mayor en los lugares más altos y secos. Gracias a ese enfriamiento nocturno, la acidez (málica) tarda más en disminuir, permitiendo que las uvas evolucionen pausada y suavemente en el viñedo.

Probando los vinos bolivianos

Actualmente Bolivia exporta sólo el 1% de su vino. Por lo tanto, si quieres degustarlo, lo más probable es que tengas que hacerlo dentro del país. La mejor ciudad para la degustación de vinos es definitivamente Tarija. Rodeada de viñedos y bodegas, Tarija es también un lugar donde las personas locales realmente aman el vino.

Hay muchas opciones en cuanto a marcas, variedades de uva y niveles de calidad, por lo cual es una buena idea obtener el asesoramiento de un local conocedor y de confianza para tomar las mejores decisiones.

"La Estación Wine House" es un buen lugar para tener una primera experiencia con los vinos locales. Se trata de una bodega especializada en la ciudad, donde encontrarás diversas opciones de vinos industriales y artesanales bolivianos, con excelentes precios.

La Estación Wine House, Tarija

15 de Abril 130, Tarija, Bolivia

Por otro lado, Tarija es también conocida por sus exquisitos asados que, por supuesto, siempre deben ir acompañados de vino. Si quieres probar esta combinación, "La Casona del Molino" y "El Fogón del Gringo" son excelentes sugerencias. Ambos sirven carne de alta calidad, ¡y los mejores vinos locales son una prioridad en sus menús!

La Casona del Molino, Tarija

Bolivar esquina, Tarija, Bolivia

El Fogón del Gringo, Tarija

La Madrid 1022, Tarija, Bolivia

Pero, explorar los vinos de altura en Tarija no se trata sólo sobre el vino en sí, sino también incluye paisajes, diversión y tradiciones, ¡de lo cual escribiré en mi próxima historia! ¡Estén atentos!